domingo, 27 de abril de 2014

Somos Adictos de Nuestra Alimentación Cotidiana.

Pasitos de bebé, día a día, lento, suave...
Pero debemos volver al principio como siempre, para volver a saltar más alto que antes. Y el principio es ni más ni menos que el disfrutar.
Dificil de creer si miramos un poco nuestra sociedad y nuestro día a día, donde nos llenan "deberes".

La entrada es disfrutar. Empezamos disfrutando, lo cual significa elegir hacer lo que queremos, abandonando los miedos por los supuestos castigos o faltas que eso nos generaría. Una vez que hacemos lo que queremos es más fácil ir despacio, porque podemos pararnos mucho tiempo en aquello que nos produce un goce. Podemos quedarnos ahí para siempre... Es como elongar sin dolor.
Claro que debemos aprender a escucharnos para poder elegir lo que queremos, porque sino ¿Cómo abrimos de saberlo? ¿Cómo saber que lo mejor para mi sin que un condicionamiento este influyendo en mi decisión?
Es ahí cuando nos percatamos que todo, absolutamente todo, esta conectado.

Hoy soy una persona tan distinta a lo que fui ayer...  Y mi punto de partida fue el disfrutar, el recuperar mi tiempo perdido. El escucharme, el animarme, incluso si lo que hacia no era lo que "debería hacer".

Por algún lado tenemos que descomprimir tantas presiones, tantas represiones diarias.
La comida es un lugar ideal para hacerlo: nadie nos molesta con lo que comemos y darle a nuestro cuerpo algo que nos resulta rico es una forma de devolvernos algo que nos quitamos todos los días por otro lado.
Entonces entramos al supermercado con la intención de regalarnos un placer. Hacemos la góndola de las frutas y las verduras a un lado y encaramos para los lácteos y las galletitas. Por supuesto que nos saben mucho más ricos estos últimos pero... ¿Te detuviste a pensar por qué?
Somos adictos porque nos hacen adictos. Adictos a químicos que desconocemos y que todos los alimentos del supermercado envasados hoy poseen. La ley asi lo permite y las empresas entienden que hacer uso de estos químicos implican más ventas. No importa tu salud, primero esta su bolsillo.

Qué difícil salir de ese circulo! Pero cuando entendemos que somos adictos, entendemos que necesitamos liberarnos. Nadie quiere vivir prisionero de una droga, no nos hace bien. Tarde o temprano empezamos a sentirnos mal y necesitamos un cambio.
Cuando sabemos qué es lo que nos hace mal, es fácil salirse, pero cuando pensamos que lo que comemos es lo normal porque todos lo hacen, y no sabemos donde buscar nuestro cambio, ahí estamos perdidos.

Necesitamos paciencia con nosotros mismos. Tenemos que aprender a disfrutar de una alimentación más sana, y para disfrutar de eso debemos primero limpiar nuestro cuerpo de todos esos químicos que venimos ingiriendo día a día. No es fácil, no es nada fácil. Es una tarea dificilísima de hecho, pero necesaria si entendemos que somos adictos y que no estamos siendo libres a la hora de elegir lo mejor para nosotros.
Somos adictos porque nos hicimos adictos desde la primera coca-cola y desde la primera golosina que comimos.
Alimentos veganos o no veganos dan igual en este caso. El supermercado nos enferma, nos adictiviza, nos esclaviza con sus "opciones" que no son opciones en absoluto, cuando estamos bajo los efectos de fármacos escondidos en el sabor...
Entender que somos adictos es de gran ayuda para poder comenzar con la liberación alimentaria.





No hay comentarios:

Publicar un comentario